ACTUALIZANDO...
Si tienes un teléfono inteligente lleno de aplicaciones o haz pasado horas esperando a que el porcentaje de la barra de carga de tu juego favorito llegue al final o si trabajas con un programa de computador seguramente habrás visto y enfrentado esta palabra: ACTUALIZANDO. Los sistemas informáticos están programados para actualizarse cada cierto tiempo para mejorar sus procesos... Te propongo que adoptes como parte de los procesos de tu vida este mecanismo de la informática.
Tanto las aplicaciones de los celulares inteligentes como los programas de un computador están diseñados para actualizarse cada cierto tiempo o cada vez que es necesario, esto con el fin de mantener sus procesos funcionando como reloj suizo, cuando no se actualiza un programa con regularidad el mismo empieza a volverse obsoleto o a funcionar de una manera incorrecta.
La función esencial de la actualización es mantener el software de un programa vivo, siendo funcional. Lo mismo sucede cuando actualizamos nuestros modelos de pensamiento, nuestros sistemas de vida, es decir cómo pensamos y cómo hacemos o dejamos de hacer las cosas.
La más perfecta computadora la tenemos sobre nuestros hombros y apoyada en nuestro cuello. Nuestra cabeza; nuestra mente. Así como todos los softwares requieren actualizaciones, lo mismo ocurre con nosotros, sin embargo necesitamos saber qué hay que cambiar, como cambiarlo y finalmente cómo realizamos una actualización y con qué frecuencia deberíamos hacerlo.
Para realizar una actualización debes saber que existe una, el proceso de descubrimiento de la actualización es el primer paso. Para el caso de los procesos mentales o sistemas de una persona pasa lo mismo. Usualmente las actualizaciones son informaciones que llegan a nosotros a través de un libro, de un video o de un comentario de una persona, sin embargo este trozo de información tiene una particularidad: Te hace sentir que esa información era necesaria, que esa información puede cambiar algo en tu vida. Puede ir desde la manera en la que te sientas en una entrevista, la manera en cómo te peinas, la manera como comes, hasta la forma como piensas. Este es un momento de auto (re)descubrimiento.
¿Quieres mejorar tus relaciones interpersonales?, ¿Quieres mejorar tu autocomunicación, tu autopercepción?, ¿Quieres mejorar la forma como te ves?, ¿Quieres mejorar? analiza sobre qué sistemas estás operando y actualízalos, y en cuanto lo hagas podrás poner a prueba si tus nuevos sistemas están dando el resultado que esperas, si no lo están haciendo, vuelve a actualizarlos. Finalmente la vida se trata de siempre estar mejorando.
Usualmente vivimos a partir de sistemas desactualizado, desde la forma cómo hacemos ejercicio y dieta hasta cómo nos comunicando con las personas e, incluso, con nosotros mismos. Es importante anotar que cada cuerpo es un sistema diferente y opera de manera diferente, pero las actualizaciones siempre son una herramienta que las personas extraordinarias están persiguiendo y es que estas actualizaciones sirven un solo propósito: Cómo poder vivir mejor, cómo ser mejor.
"Somos lo que hacemos de
forma repetida. La excelencia, por tanto,
no es un acto, sino un hábito"
Aristóteles
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